Una de las principales funciones de las máquinas desenrolladoras es la de asegurar que el material llegue a las fases subsiguientes del proceso de producción de manera ordenada y sin complicaciones. Cuando se trabaja con bobinas de metal, el desenrollado manual puede ser un proceso laborioso y, a menudo, peligroso. Las máquinas desenrolladoras automatizan este proceso, minimizando el riesgo de lesiones y aumentando la velocidad de producción.